Sánchez pedirá hoy a la UE que financie la interconexión energética por los Pirineos y el Mediterráneo

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Pedro Sánchez en su coche oficial.
Joan Guirado

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, planteará este martes a los líderes de la Unión Europea interconexiones eléctricas al corredor pirenaico e incluso por el Mediterráneo en el caso del hidrógeno. Así lo han confirmado a OKDIARIO, la madrugada de este lunes al martes, fuentes del Gobierno con la reunión del Consejo Europeo extraordinario que se celebra en Bruselas. Los jefes de Estado y de Gobierno han alcanzado un acuerdo que reducirá las exportaciones de petróleo ruso cerca de un 90%. El objetivo no es otro que el de asfixiar económicamente a Vladímir Putin y así obligarle a poner fin a la invasión en Ucrania.

Sánchez defenderá que esta interconexión que dé salida al “gas e hidrógeno verde» desde España al resto de países europeos sea «financiada con cargo a presupuestos europeos”. “Los españoles ya pagan las regasificadoras. El precio de regasificación lo pagamos los consumidores. Si queremos poner a disposición de Europa nuestras capacidades de reserva, que están por encima del 60% cuando la UE está en el 30%, tiene que financiarlo no España sino Europa” reivindicará el presidente español ante sus colegas comunitarios. La Comisión Europea defiende la idea de que España se convierta en un hub energético. El problema es que nadie quiere asumir el alto coste que tiene la infraestructura, difícil de amortizar.

Gas

Este martes los veintisiete van a estudiar la posibilidad del topaje al precio del gas a nivel europeo. La factura de los precios de la energía es una de las principales preocupaciones de todos los estados miembros. A la práctica, lo que debatirán en la reunión del Consejo Europeo, es que la excepción ibérica que en marzo lograron España y Portugal para abaratar el precio de la factura de la energía, y que todavía no ha entrado en vigor por la tardanza del Ejecutivo en remitir la documentación necesaria a Bruselas, esté a disposición de todos los Estados miembros. «Lo apoyamos» aseguran desde Moncloa que van a seguir defendiendo esta posibilidad pese a la reticencia de algunos países.

Como ocurrió en la última cita del mes de marzo, el acuerdo en esta cuestión «es difícil» recuerdan fuentes de la delegación española. La oposición de algunos países nórdicos, como Alemania o los Países Bajos, y el recelo también de Francia por su pérdida de competitividad -en el caso de la excepción ibérica-, estuvieron a punto de hacer estallar la medida estrella que proponía el presidente español. Finalmente, la presión de España y Portugal, con numerito incluido de Sánchez levantándose de la mesa, facilitó una excepción que también ha logrado este lunes Hungría por parte de los veintisiete por el veto al petróleo ruso.

Desde el Gobierno reiteran que ese topaje del gas a nivel comunitario «no es inmediato y es muy complejo, hay muchos vendedores y compradores, clientes intermedios… igual que con las compras de gas». Una de las cuestiones que más preocupan a la Comisión Europea y a los estados miembros, respecto a esta cuestión, es como afectaría al mercado interior y a la competitividad de los países de la UE.

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